Masaje Infantil IAIM
Noticia publicada el 31-03-2016
Cuando pensamos en el masaje infantil, se nos viene a la mente las caricias que ofrecemos al bebé, apoyadas en una técnica. El masaje infantil de la “International Association of Infant Massage - IAIM” es mucho más que una técnica, es la oportunidad de crear una relación padres-hijos basada en el respeto y la confianza. Y ello ayudará al conocimiento mutuo, la comunicación fluida y la seguridad que el niño necesita para crecer de manera saludable.
Muchos padres esperan ansiosos a que su hijo hable para poder entenderle, sin embargo, si estamos atentos, nos damos cuenta de que el bebé desde que nace, ya se expresa con su lenguaje no verbal. Un lenguaje que es muy básico al principio, pero que va enriqueciéndose al pasar los meses y, algo muy importante, crece a medida que los padres dan una respuesta adecuada a esas señales no verbales que emite. Si la respuesta del adulto se ajusta a la demanda del bebé, éste recibirá el refuerzo necesario para continuar y potenciar esa señal, porque ha tenido el resultado esperado. Por lo tanto debemos estar atentos a ese lenguaje no verbal y es por ello que antes de hacer el masaje al bebé, debemos pedirle permiso, hablándole, avisándole, frotando nuestras manos con aceite delante de su carita, mostrándole nuestras manos, etc. Un ritual, que cada familia adaptará, para que el bebé pueda prever que el espacio del masaje ha llegado y nos pueda decir si le apetece o no. E incluso si nos da señales de aceptación, en cualquier momento el bebé puede cansarse de la estimulación, o de mantener la atención y mostrar señales de desagrado que serán escuchadas y finalizaremos el masaje, también con alguna señal como un beso, un abrazo...
Pero hay algo más que ayuda al conocimiento mutuo y es el compartir tiempo. Es cierto que los padres dedican muchas horas a sus hijos, pero el masaje infantil nos ofrece la oportunidad de tener un espacio juntos donde lo único que hacemos es disfrutar de “estar”, disfrutar de las miradas, de las sonrisas, de las caricias, de los sonidos, de las palabras… El bebé se siente escuchado y se expresa, esperando la respuesta de su mamá o de su papá. Y cuando el niño va creciendo sabe que durante el masaje esa escucha está presente y busca ese momento cuando tiene algo valioso que compartir con sus padres. Una mamá que había hecho masaje a su hija desde bebé, comentó que con 5 años, al salir de la escuela había días que le decía “mamá hoy me haces un masaje, que tengo algo importante que contarte”. Porque a menudo no nos damos cuenta de que no damos suficiente valor a lo que los niños nos explican y nos permitimos estar “aprovechando el tiempo” mientras ellos comparten sus vivencias del día a día.
Aprender a dar masaje al bebé, nos da la excusa para parar de nuestro ritmo diario de prisas y demostrarle al bebé que estamos a su lado. Cuando este niño va creciendo, el masaje deberá ser más lúdico porque necesita más actividad, le ofreceremos juegos de tacto, masaje con objetos… y además él querrá participar dando el masaje. Se convertirá en un momento de disfrute en familia, donde las risas y la creatividad estarán muy presentes.
Por todo ello, el profesional que transmite el aprendizaje del masaje infantil, debe saber ofrecer la técnica adecuada, recursos de adaptación del masaje a las necesidades de cada familia, información sobre las señales del bebé, etc. No obstante, también debe saber quedarse al margen para que el protagonismo lo tenga la propia familia, aumentando así la seguridad y la autoestima de los padres como expertos en su hijo. El niño interiorizará esta seguridad y le permitirá adentrarse al mundo con la comprensión y el apoyo de sus padres.•
Ana Fernández Salas
Formadora IAIM
Educadora IAIM-AEMI. Socia de AEMI nº 12
IAIM y Vimala McClure
Vimala McClure descubrió el Masaje Infantil en la India en 1973. Cuando volvió a su país (USA) empezó a investigar y a practicar esta disciplina, elaborando un programa para la transmisión de este masaje a las familias con bebés. En los años 80 Vimala creó el Programa Internacional de Masaje Infantil IAIM y elaboró la secuencia de masaje adaptada a bebés integrando y combinando las técnicas de masaje hindú, sueco y sus conocimientos en yoga y reflexología. Actualmente este programa se imparte en más de
60 países de todo el mundo.
Vimala McClure apoya el trabajo de IAIM cómo única Asociación autorizada para impartir el programa que creó y que actualmente, debido a las investigaciones y estudios realizados, se considera con rigor científico.