Atención temprana

Noticia publicada el 15-12-2017

‘Hay que acudir a Atención Temprana desde el momento en que detectamos que el niño no cumple los parámetros de desarrollo para su edad’


La Atención Temprana es un conjunto de intervenciones dirigidas a niños de cero a seis años y a su entorno, para dar respuesta a las necesidades que presentan los niños con trastornos en su desarrollo o con riesgo de padecerlos. La intervención debe tener un carácter global teniendo en cuenta los aspectos intrapersonales, biológicos, psicosociales y educativos.



¿Qué tipo de trastornos trata?

Del desarrollo, cuando un niño no cumple todos los ítems correspondientes a su edad. Por ejemplo, que con tres meses no levante la cabeza o que no se siente con seis meses. También existen los trastornos biológicos que son complicaciones en la hora del parto, prematuridad, microcefalia y cromosomopatías, entre otros. Además, están los niños con trastornos sensorial-visuales y auditivos y los trastornos motores, que son los niños que nacen con espina bífida, parálisis cerebral e hipotonía.

 

¿Cuándo acudir a Atención Temprana?

Desde el primer momento en que detectamos que el niño no cumple los parámetros de desarrollo establecidos para su edad. Estos parámetros están avalados por la sociedad española y americana de pediatría como guía del desarrollo de las niñas y de los niños. Se pueden consultar en la página www.hospiten.com Unidad de atención temprana.



¿Hay niños que sin sufrir ningún trastorno biológico presenten algún tipo de retraso en su desarrollo?

Sí, se trata de los niños de los que hablábamos anteriormente que, debido a su entorno familiar y social, no son estimulados. Está establecido que un niño con dos años debe manejar un repertorio de 40 a 50 palabras y combinarlas entre sí, si estos no sucede el niño tiene un retraso en su lenguaje que podría dificultarle relacionarse con sus iguales y con los adultos.

 

¿Por qué es importante detectar esos retrasos?

Porque en la primera infancia el sistema nervioso tiene una maduración y una importante plasticidad cerebral, esto quiere decir que el sistema nervioso dota a los  niños y las niñas de una mayor capacidad de recuperación y reorganización orgánica y funcional, que decrece cuando pasan los años.


La gente no le da importancia al gateo ¿por qué es tan importante?

Conecta los hemisferios cerebrales, crea rutas de información cruciales para la maduración de las diferentes funciones cognitivas y trabaja el patrón cruzado, que es la función neurológica que hace posible el desplazamiento corporal en equilibrio del cuerpo humano. Lo que permite la coordinación ojo-mano y el enfoque de los ojos hacia los objetos que nos rodean, beneficiando entre otras cosas, la escritura.

 

¿Hay desconocimiento por parte de padres, profesores y profesionales médicos respecto al cumplimiento de estos ítems en el desarrollo?

Sí, los padres no tienen por qué saber estos ítems en el desarrollo de sus hijos y confían en el entorno, se encuentran con frases tipo: “ya caminará, ningún niño se queda sin hablar, las niñas son más espabiladas y los niños caminan antes”. Estas ideas provocan un relajamiento de los padres respecto al buen desarrollo de sus hijos e hijas en la primera infancia desaprovechando la plasticidad cerebral.•

Nuria Lorenzo González
Logopeda y Pedagoga
Hospiten Roca

Volver