Ambiente de parto
Noticia publicada el 25-02-2017
Es muy posible que en algún momento te hayas planteado qué ambiente es el ideal para que tu cuerpo pueda segregar las hormonas necesarias para que el parto transcurra con normalidad; ¿un gran hospital?, ¿un hospital pequeño?, ¿tu propia casa?, ¿un quirófano?...
En esta ocasión voy a tratar de explicar cómo podemos ayudar a nuestro organismo para que se liberen todas las cascadas de estas hormonas necesarias en un parto, siempre favoreciendo la fisiología y el desarrollo normal de mismo.
La principal hormona que se segrega en el parto se llama oxitocina, también conocida como “la hormona del amor”. Se conoce también por este nombre porque se segrega con todas aquellas situaciones que nos proporcionen bienestar, sensación de placer, de confianza, seguridad, en definitiva en todas las dimensiones del amor.
En el parto, la oxitocina cumple una función principal, que es la de provocar las contracciones, esas que harán que poco a poco tu cuello del útero se dilate y des a luz a tu bebé. En el postparto, colaborará a que el útero se contraiga fuertemente para ir volviendo progresivamente al lugar que ocupaba antes de quedarte embarazada, y evitando el sangrado. También te ayudará a enamorarte de tu bebé y a que la lactancia materna se instaure correctamente.
Por otro lado, en esta orquesta hormonal, nos encontramos con la adrenalina. Esta es una hormona que se segrega en situaciones de estrés, de miedo. Esta hormona es contraria a la oxitocina y por tanto no te conviene tenerla en tu parto, ya que a más adrenalina menos oxitocina.
Una de las claves que puedes tener en cuenta en el momento del parto es evitar las situaciones que te hagan segregar adrenalina. Tendrías que evitar entonces todo lo que te haga tener miedo y que provoque estrés e inseguridad.
Ahora empezarás a entender porqué se ha empezado a cambiar la apariencia de las maternidades, de los paritorios. Muchas mujeres a las que he acompañado en el momento del parto me han dicho que el paritorio parece más un “Spa” que un hospital. ¡Ahora ya sabes el motivo!
En el momento del parto vivirás una situación nueva, una situación de incertidumbre, de sensaciones nunca vividas, de temor a lo desconocido, de miedo a que no todo salga bien.
Te estarás preguntando; ¿cómo puedes hacer entonces para no segregar adrenalina en situaciones que no conoces y te dan miedo?
“Está en tus manos informarte y decidir dónde te sientes más segura para parir, qué necesitas en ese momento y a quién quieres a tu lado”
Durante el embarazo es importante que te informes, que conozcas qué le está pasando a tu cuerpo y qué le pasará en el momento del parto y del postparto. Con ello vas a conseguir que esa inseguridad de la que antes hablaba, inseguridad generada por el miedo a lo nuevo, a lo desconocido, sea menor. Al menos, y aunque la situación que estás viviendo sea nueva, al informarte sabrás identificar lo que te está sucediendo a ti y a tu bebé. Una buena opción para ello, y que muchas veces está infravalorada por la población en general, es la preparación a la maternidad y a la paternidad que imparten las matronas en el centro de salud. En ella, tu matrona te explicará los cambios en el embarazo, las diferentes fases del parto y del postparto, y te dará herramienta para empoderarte en ese momento y sobre todo para tener confianza. Es por ello que te animo a buscar una matrona de referencia, que te apoye y ayude en esta etapa de tu vida tan especial y única.
Por ilustrar con una situación concreta: muchas mujeres cuando ya tienen las semanas adecuadas para parir (el embarazo ha llegado a término) están expectantes a cualquier señal que les de su cuerpo, y cualquier cambio o señal nueva lo suelen vivir con gran estrés. Pongamos el ejemplo del conocido “tapón mucoso”, que no debería de ser motivo de alarma y mucho menos de urgencia. Si estás en casa y de repente ves que cae el tapón mucoso (una sustancia gelatinosa con algo de sangre), si nunca te han hablado de él puede que te asustes y por tanto segregues adrenalina y, como ya he explicado anteriormente, inhibas la liberación de oxitocina. Muy diferente sería si previamente te hubieran explicado que la expulsión del tapón mucoso es normal, no es nada malo y no tienes nada que hacer más que estar tranquila; en este caso, al saber que es parte del proceso normal no supondría un momento de estrés. Así pasaría con todo lo que poco a poco irás viviendo en el momento del parto: a más información, más confianza y, por tanto, más favorecemos una buena secreción de oxitocina.
El parto es una parte de la sexualidad de la mujer. En el momento del parto se liberan hormonas similares a las que se liberan cuando tienes una relación sexual. Es por ello que debemos buscar un ambiente parecido en ambos actos. Generalmente, a nadie de nosotros nos gustaría tener una relación sexual en una sala muy iluminada, con un foco apuntando hacia nuestros genitales, con máquinas en funcionamiento con sus respectivas alarmas, con personas que no conocemos mirando como practicamos sexo, con alguien guiando la velocidad de nuestra relación... En definitiva, cuando practicamos sexo nos suele gustar hacerlo en un ambiente íntimo, en el que nos sentimos seguros, sin tener vergüenza y siendo libres de hacer lo que nos apetece.
En el momento del parto se liberan hormonas similares a las que se liberan cuando tienes
una relación sexual.
Entonces, después de todo lo que he comentado ¿Dónde crees que sería el lugar indicado para parir y que todo estas hormonas se liberen? La respuesta a esta pregunta solo la tienes tú. Tienes que buscar un ambiente que te aporte seguridad, tranquilidad y confianza. Buscar tu “nido de parto”, ese en el que te meterás y en el que te transformarás. Hay mujeres que esto lo encuentran en la intimidad de su casa, acompañadas por matronas a las que han conocido durante el embarazo y con las que han establecido una relación de auténtica confianza. Confían plenamente en su poder como mujer para parir sin necesidad de ningún tipo de intervención médica. Este grado de seguridad y de confianza en ellas mismas hace que el proceso de parto fluya con total normalidad. Pero no todas las mujeres pueden parir en casa que, a priori, sería el ambiente ideal. No podrían porque desde que haya algún tipo de miedo o inseguridad el proceso no transcurriría con normalidad. Es por ello que hay mujeres que precisan un hospital para parir, pues para conseguir esa confianza y seguridad necesitan sentir que están en una institución sanitaria.
Lo que me gustaría transmitir como idea principal con este artículo, es que en ti misma se encuentra la clave para que tu parto se desarrolle con normalidad, porque están en tus manos informarte y decidir dónde te sientes más segura para parir, qué necesitas en ese momento y a quién quieres a tu lado.
Si necesitas la intimidad de tu hogar, acompañada por quien tú decidas y con matronas de confianza, programa un parto en casa porque eso es lo que necesitas.
Si te sientes más segura en un hospital, busca uno que respete tus decisiones y la manera en la que quieres que se desarrolle tu parto, programa lo que tienes que llevar para crear tu “nido de parto”.
Cuando lo tengas decidido solo hace falta dejarte llevar por tu cuerpo, porque él está preparado para la transformación que vivirás en el momento del parto de mujer embarazada a madre.
Recuerda que está en ti empoderarte y recuperar tu derecho a decidir sobre tu parto. Cuando una mujer se empodera está contribuyendo también al empoderamiento conjunto de todas las mujeres.
Feliz embarazo, parto y crianza.•
Gabriel Pérez
Matrona
